19 abr 2025

El pacto


Soy sombra y al tiempo, imagen en un espejo. Ambas cosas, quizás entidades, son propiedad de mi dueño. Vivo con él. Nos aceptamos y aprendemos el uno del otro. Meditamos juntos, discutimos, velamos nuestros sueños y nos expresamos al mundo. Puedo permanecer en silencio por tiempo indefinido, pero nunca estoy apagado. Puedo expresarme inesperadamente, como inesperada puede ser la erupción de un volcán; aunque no siempre.
Me llamo Okanu. ¿entidad, personalidad, alter ego, locura? 
—Qué más da—me digo. Júzgalo tú; o mejor no pierdas el tiempo. Quizás, juzgar no te corresponda.

Hoy, he firmado un pacto con mi dueño:
Dependo de ti y aunque alimento tu mente, es tu cerebro el que me da vida. Dice la neurología que cuando tu corazón se detenga y tus pulmones ya no tengan capacidad, yo podré seguir contigo un tiempo más, hasta que la actividad bioeléctrica de tus sistemas neuronales se apague definitivamente. Mi compromiso, el pacto que hoy firmamos, consiste en la promesa de que en nuestro viaje a la nada, en el paso al vacío y hacia nuestra desintegración, seguiremos hablando del agradecimiento a la vida y no de otra cosa. Hasta que el susurro inaudible y el silencio final, nos apague definitivamente.

 

  Okanu      





Compartir aquesta entrada:

4 comentarios:

  1. No t'el mereixes a Okanu, tanta fidelitat no sovinteja.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No creguis, el que passa és que no té cap altra alternativa 😉

      Eliminar
  2. ¿Qué va a hacer tu fiel cuando no estés? ¿Migrará a otra personalidad?

    ResponderEliminar

Añade tus comentarios
Haz que enriquezcan la entrada. ¿Emoticonos? Copia y pega:
😀😁😂😃😄😅😆😇😉😊😋😌😎😏😐😓😔😕😘😜😞😠😲😳🙏💩