Renovar, morir,

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...o simplemente diversificar contenidos

Estos días, he estado entretenido en «resucitar» (muy propio para estas jornadas santas) mi espacio en Tumblr. No hay una traducción para esa palabra, aunque al parecer algunos angloparlantes la usan como nosotros usaríamos batiburrillo. Pero, es solo una aproximación a la idea de un desorden ordenado.

Y posiblemente Tumblr sea un desorden o mezcla entre lo que es Facebook, Twitter,Wordpress (o Blogger) y Pinterest. Algo así.

Hasta ahora, allí he ido publicando fotos, prácticamente en exclusiva, dando a mi espacio un carácter de fotoblog, pero a partir de ahora, añadiré a modo de espejo (mirror) copia de mis publicaciones en mi otro blog aquí en Blogger. En un tiempo (calculo unos seis meses) sabré como ha sido la experiencia y decidiré que hago.

El entorno cultural español no ha apostado por Tumblr. Especialmente los contenidos literarios, aunque tampoco los gráficos. En 2020 se realizó una encuesta (no conozco otra) en la que solo el 29% afirmó «conocer» Tumblr y un 7% aseguró visitarlo al menos una vez por semana.

Tumblr es la única red social que soy capaz de soportar. Tan alejada de la idiosincrasia de Facebook o Twitter que algunos pondrían en cuestión que realmente lo sea. 

Es realmente una pena, puesto que así como Blogger ha permanecido congelada (tecnológicamente hablando en más de una década) Tumblr, mejora a ojos vista y con mucha frecuencia. Puedes operar Tumblr en tu ordenador o en su aplicación para móviles (Android y entorno Apple) y realmente se trata de una aplicación muy avanzada y con todas las posibilidades de la plataforma.

Hay no obstante, dos cosas que son bien ciertas: No es una plataforma cómoda para los analfabetos digitales. No digo que sea de uso inalcanzable, pero sí, que su curva de aprendizaje es larga. 

Un amigo me dijo que no le gustaba porque, así como Blogger permite «trapichear» con los diseños de la plantilla, en Tumblr no se podía. —¡Error!— No solo se puede, sino que ya las mismas plantillas llevan implícito un panel de control más que exuberante y por supuesto se puede jugar con el código html. Para colmo la plataforma, facilita un software, para «construirse» partiendo de cero, tu propia plantilla. 

Allí, en Tumblr olvídate de los comentarios y conversaciones. Se puede, pero es algo que debe usar, calculo que, un 0,1% de los usuarios. Allí si es éxito es medible, se mediría a base de las veces que tus entradas son «re-publicadas*» en otros blogs, también por los «me gustas» recibidos. Pero claro, nadie se dedica a calcular rankings. 

Así pues, si lo tuyo es el parloteo de comentarios, olvídate. Aunque insisto, hay un apartado llamado «respuesta» que es un sucedáneo y bastantes «tumblers» tienen instalado en su espacio, el sistema Disqus.

Iré relatando...

*Sé que republicadas se escribe sin guion, pero lo he incluido aposta para enfatizar la idea